Expedientes Electrónicos GAD Loja 2006 II

 


La influencia de la burocracia, en su mal sentido conceptual, procura un factor negativo en la materialización de la transparencia como pilar del Gobierno Abierto. 

Se puede aseverar con cierta certeza que hoy en día, de estar Max Weber vivo, no asimilaría con mucho agrado la tergiversación que se ha hecho de su concepto “burocracia” volcado como sinónimo de gestión pública torpe y viciosa.

Es necesario el usufructo de los recursos que internet proporciona por parte de los poderes públicos lo que ha conducido a la acuñación del concepto de “e-gobierno”; el mismo debe ser explotado profundamente, si lo que se busca es procurar un vínculo directo con el ciudadano y la tan aclamada transparencia administrativa, vínculo que solamente puede ser concebido a través de la aplicación de las nuevas tecnologías a la gestión pública ya sea en la órbita Nacional, Provincial o Municipal (GAD´s).

Es así que el mayor o menor acceso a la información pública o de interés general depende en gran medida de los operadores a cuya responsabilidad se encuentre la disponibilidad o no de la misma.

La burocracia resiste a perder su poder a favor de los ciudadanos y tiende a seguir manteniendo en secreto sus informaciones más valiosas o comprometidas para conservar sus ventajas y evitar cualquier atisbo de crítica. El conjunto de autoridades, funcionarios o empleados públicos que poseen la valiosa información sobre la actividad de los poderes públicos y que tienen en sus manos el poder de decidir facilitarla o no, constituyen la llamada “burocracia”.

Desde las altas esferas del gobierno como puede ser un ministerio, hasta la unidad más básica de gestión, como puede ser un GAD Parroquial, encontramos estos operadores cuya única función es la de evitar el acceso irrestricto a la información que tienen bajo su control por parte del ciudadano, todo con el objeto de procurarse un beneficio propio o evitar una crítica a su labor. 

La “cultura del secretismo” que tiene el solo objeto de proteger intereses contradictorios con el cargo de funcionario público, amparados bajo la forzada interpretación de la noción de “discrecionalidad”, han llevado a una cultura de promulgación de la burocracia como sinónimo de deficiencia, entorpeciendo la puesta en marcha de las más avanzadas y eficientes medidas de gobierno.

El principio por el cual se rigen estos individuos, es que la información no es propiedad del ciudadano, sino del operador que la gestiona. La generalidad de los ciudadanos ni siquiera es consciente de que tiene derecho a acceder a la información pública. Y si el propio ciudadano no presiona para vencer la fuerte resistencia opuesta por las autoridades y funcionarios, el acceso a la información no es factible.

Presentación realizada en el mes de Agosto 2006 al Señor Alcalde del Municipio de Loja y Directores para que den su visto bueno para continuar con el desarrollo de la Iniciativa, lo cual fue positivo pero nunca se consiguió los recursos humanos y materiales para su implementación en la siguiente propuesta indico cuanto fue la irrisoria partida presupuestaria asignada el poder de la burocracia se lo vive se lo siente y siempre se encuentra caminos escabrosos que lo generan los lamebotas que sienten que van a perder el poder se los ve como gatos colgados del techo.